En mi opinión hay dos cosas imposibles en esta vida: evitar la muerte y cansar a un springer.
Esta raza es muy versátil, desde el espectacular ejemplar capaz de ganar el Westminster, como aquel capaz de levantar la mas sigilosa presa en el campo.
La elegancia del springer es notable hasta para el mas inexperto ojo canofilo, simetría perfecta cubierta por un manto largo de movimiento suave, que se percibe con la voluntad del perro por ganar la atención de cualquiera. Su mirada tierna, la enmarca un rostro de seriedad y alcurnia, que en conjunto su apariencia es digna de ser compañero de un rey, además de su lealtad como el mas fiel caballero.
Tan leal como atlético es el springer, aunque tranquilo y educado, con cautela reserva toda la energía que ávido derrocha al campo libre, corriendo desenfrenadamente motivando a su amo para jugar con él.
Tan increíble como la palabra Hidrofilo es la pasión de estos perros por el agua, cual si fuera su mayor fuente de energía, se reactivan para convertir la tarde en una practica olímpica de natación. En momentos, yo mismo he llegado a sentir cansancio de ver a mis perros correr de un lado a otro, persiguiéndose uno a otro, cayendo, levantandose, brincando al agua, saliendo, etc. etc., así como también el extraño pensamiento de como no es posible que les de un paro cardiaco con tanta actividad continua.
Antes era divertido llevar a mi unica perra al campo y lagunas, con el incauto objetivo de "cansarla", ahora es apasionante llevar a todos mis perros a deshaogarse un poco... y si, con el mismo incauto objetivo: "cansarlos".
Esta raza es muy versátil, desde el espectacular ejemplar capaz de ganar el Westminster, como aquel capaz de levantar la mas sigilosa presa en el campo.
La elegancia del springer es notable hasta para el mas inexperto ojo canofilo, simetría perfecta cubierta por un manto largo de movimiento suave, que se percibe con la voluntad del perro por ganar la atención de cualquiera. Su mirada tierna, la enmarca un rostro de seriedad y alcurnia, que en conjunto su apariencia es digna de ser compañero de un rey, además de su lealtad como el mas fiel caballero.
Tan leal como atlético es el springer, aunque tranquilo y educado, con cautela reserva toda la energía que ávido derrocha al campo libre, corriendo desenfrenadamente motivando a su amo para jugar con él.
Tan increíble como la palabra Hidrofilo es la pasión de estos perros por el agua, cual si fuera su mayor fuente de energía, se reactivan para convertir la tarde en una practica olímpica de natación. En momentos, yo mismo he llegado a sentir cansancio de ver a mis perros correr de un lado a otro, persiguiéndose uno a otro, cayendo, levantandose, brincando al agua, saliendo, etc. etc., así como también el extraño pensamiento de como no es posible que les de un paro cardiaco con tanta actividad continua.
Antes era divertido llevar a mi unica perra al campo y lagunas, con el incauto objetivo de "cansarla", ahora es apasionante llevar a todos mis perros a deshaogarse un poco... y si, con el mismo incauto objetivo: "cansarlos".